Cerebros de hombres y mujeres se conectan de forma diferente
Hombres y mujeres somos distintos. No sólo en la forma en que nos relacionamos con el medio, sino en habilidades espacio-temporales, intereses y hasta en la capacidad de comunicarse con otros. Hasta ahora, hay varias razones que la ciencia ha dado para explicar estas divergencias, que van desde una distinta forma de educación hasta estructuras del cerebro más o menos desarrolladas. Ahora, un reciente estudio de la U. de Pensilvania (EE.UU.) suma una nueva razón: muestra que los cerebros de hombres y mujeres se conectan de forma diferente. Y que esa diferencia se establece desde los 14 años. Cada conexión explica muy bien por qué ellos son mejores en algunas cosas y ellas en otras. Distinto cableado La investigación reclutó a 949 personas entre ocho y 22 años de edad, a quienes les realizaron un examen que mapea las conexiones que hacían las neuronas de sus cerebros al realizar diferentes acciones. De ellas, 521 eran mujeres y 428 hombres. Considerando datos por edad, el estudio reveló que antes de los 13 años, las diferencias en la conectividad de cerebros masculinos y femeninos no son tan evidentes. Sí lo son a partir de los 14 años, lo que sugiere que el desarrollo hormonal tiene también algún grado de responsabilidad. Las diferencias en las imágenes cerebrales fueron elocuentes. Si la actividad cerebral en los hombres era siempre de la nuca a la frente o viceversa, y siempre dentro del mismo hemisferio del cerebro, en las mujeres, en cambio, la conexión es de derecha a izquierda y en ambos hemisferios. No es lo único. Los científicos descubrieron que en el cerebelo (estructura que está debajo del cerebro y que controla los movimientos complejos y aprendizaje de procedimientos), este patrón se invierte. “Estos mapas cerebrales nos muestran una marcada diferencia -y complementariedad- en la arquitectura del cerebro humano, que ayuda a proporcionar una base neural de por qué los hombres tienen éxito en ciertas tareas y las mujeres en otras”, dice Ragini Verma, líder del estudio. Mecánica y multitareas Los datos muestran que los hombres tienen cerebros que están estructurados para facilitar la conectividad entre la percepción y la acción coordinada. Por eso son más ágiles y rápidos ante movimientos imprevistos y se ubican mejor en el espacio. También tienen más probabilidades de mejorar en el aprendizaje y de realizar tareas con una sola mano, como montar en bicicleta o manejar. Por su parte, los cerebros de las mujeres muestran que están “cableados” para tener una mejor comunicación. Por eso, dicen los expertos, las mujeres tienen habilidades de memoria superior y cognición social, lo que las capacita más para realizar multitareas y pensar en soluciones que puedan servir para un grupo. La actividad del cerebelo masculino (donde había conexiones más largas y entre hemisferios) explica por qué los hombres son más hábiles para las actividades que implican acciones físicas y coordinadas, y la relación con el medio espacial. En las mujeres, el cerebelo hacía conexiones más cortas y al interior de cada hemisferio, lo que tiene relación con el procesamiento analítico de las ideas que se producen en el hemisferio izquierdo con los procesos más intuitivos de la información del hemisferio derecho. Para Ruben Gur, otro de los investigadores, “es sorprendente lo complementario que los cerebros de las mujeres y los hombres son en realidad”. Fecha de publicación: 10-diciembre-2013 |